Por mucho que repitamos que «más vale prevenir que curar» no hacemos caso. Por lo menos en lo que a la informática se refiere. ¿Cuántas veces habremos oído que es muy importante hacer con regularidad copias de seguridad de todos nuestros datos? Seguro que miles. La realidad es que hasta que no ocurre un problema no somos conscientes de lo que implica perder todos los datos de un ordenador. En nuestros discos duros residen trabajos para la universidad, informes para la oficina, oposiciones enteras o las fotografías de toda una vida, sin que se nos haya pasado por la cabeza que no hace falta mucho para que a un ordenador le dé por no encenderse.
Con la llegada de los móviles la situación empeora. Se trata de otro dispositivo más en el que no somos conscientes de cuanta información hemos almacenado hasta que no la perdemos. Si te enfrentas a la catástrofe de ver que tu móvil o portátil acaban de estropearse, que no cunda el pánico, todavía hay opciones de salvar la información. ¿Cómo? Sigue leyendo.