- El puerto USB-C es obligatorio en los nuevos iPad tras la normativa europea.
- Permite cargar el iPad, transferir archivos, conectar accesorios y usar monitores externos.
- Los iPad más recientes dejan atrás el Lightning e incorporan USB-C.
- Resolvemos las dudas más frecuentes sobre el uso del USB-C en las tablets de Apple.
Desde la entrada en vigor de la Directiva europea, las tablets actuales de Apple están equipadas con puerto USB-C, abandonando así el clásico conector Lightning. Este cambio se ha producido en respuesta a la normativa que exige la estandarización de cargadores para dispositivos móviles, lo que ha supuesto una transformación en la conectividad de los iPad más recientes.
El puerto USB-C no solo sirve para cargar la batería del iPad, sino que abre la puerta a un abanico de posibilidades que van mucho más allá. Con este conector, los usuarios pueden aprovechar funciones avanzadas y conectar todo tipo de accesorios sin complicaciones.
Todos los usos del puerto USB-C en tu iPad
Una de las principales ventajas del USB-C en iPad es su versatilidad. Permite recargar el dispositivo de manera rápida y eficiente. Además, puedes utilizar la energía del iPad para cargar otros aparatos, como smartphones, auriculares u otros gadgets compatibles, siempre que cuentes con un cable adecuado (USB-C a USB-C, o USB-C a Lightning para modelos antiguos). Para ampliar aún más sus posibilidades, también puedes consultar cómo usar un iPad como pantalla externa.
El uso del USB-C va mucho más allá de la simple carga. Con este puerto puedes conectar unidades de memoria externas, como pendrives y discos SSD compatibles. La transferencia de archivos entre la tablet y estos periféricos resulta sencilla e inmediata, sin necesidad de recurrir a un ordenador como intermediario. Los adaptadores y hubs USB-C ampliarán aún más las opciones, permitiendo conectar varios accesorios a la vez.
Otra funcionalidad clave del puerto USB-C en iPad es su compatibilidad con teclados y ratones con cable. Aunque los periféricos inalámbricos siguen siendo útiles, la opción de usar dispositivos con cable elimina la dependencia de baterías y mejora la respuesta, algo apreciable en tareas exigentes como la edición musical o los videojuegos.
Los hubs y bases dock también son compatibles con los iPad equipados con USB-C, lo que implica que puedes gestionar conexiones múltiples de manera sencilla: teclados, ratones, micrófonos, interfaces MIDI, tarjetas de sonido o incluso un adaptador Ethernet para una conexión de red más estable.
Una de las novedades más valoradas es la posibilidad de conectar el iPad a un monitor externo para crear un espacio de trabajo ampliado o utilizarlo como segunda pantalla de tu ordenador. Con el uso de un adaptador HDMI compatible (HDMI 2.0 en los modelos más avanzados), se pueden reproducir contenidos en calidad 4K y 60 Hz, e incluso disfrutar de formatos HDR10 y Dolby Vision en modelos con procesadores M1 o superiores.
Gracias a la función Stage Manager (Organizador visual), los iPad con chips modernos permiten utilizar el modo escritorio extendido real. Puedes trabajar con varias aplicaciones a la vez, reubicarlas y redimensionarlas, o aprovechar la tablet como una pantalla secundaria y completamente funcional. En modelos menos nuevos, la opción queda limitada a duplicar la pantalla. Si deseas profundizar en cómo sacar el máximo partido a las conexiones del iPad, no dudes en visitar nuestra guía sobre usar Sidecar para convertir tu iPad en una segunda pantalla.
Para quienes producen música o contenido multimedia, el USB-C del iPad resulta especialmente útil. Es posible conectar mesas de mezcla USB, micrófonos profesionales o dispositivos MIDI y trabajar directamente sobre la tablet, usando aplicaciones como GarageBand u otras presentes en la App Store.
Modelos de iPad con puerto USB-C
Apple ha ido incorporando progresivamente el puerto USB-C a toda su gama iPad. La lista de modelos disponibles con esta conexión es cada vez más amplia, e incluye tanto las gamas profesionales como las más asequibles. Según la propia página de soporte de Apple, estos son los modelos equipados con USB-C:
- iPad Pro (M4)
- iPad Pro de 11 pulgadas (todas las generaciones desde la primera)
- iPad Pro de 12,9 pulgadas (desde la tercera generación)
- iPad Air (M2 y M3)
- iPad Air (cuarta y quinta generación)
- iPad mini (A17 Pro)
- iPad mini (sexta generación)
- iPad (A16)
- iPad (décima generación)
El avance hacia el USB-C garantiza una mayor compatibilidad y prepara las tablets de Apple para el futuro, permitiendo utilizar accesorios universales y facilitar la interoperabilidad entre dispositivos. Si quieres saber cómo aprovechar al máximo tus conexiones, también puedes consultar nuestras recomendaciones en la mejor guía para elegir adaptadores de audio y conexión.
Preguntas frecuentes sobre el USB-C en iPad
¿Qué dispositivos se pueden conectar al puerto USB-C del iPad?
El puerto permite la conexión de teclados, ratones, memorias externas, monitores HDMI, hubs USB-C, mesas de mezcla, interfaces de audio y muchos otros accesorios.
¿Qué requisitos hay para cargar otros dispositivos desde el iPad?
Solo necesitas que el iPad tenga batería suficiente y disponer de un cable compatible (USB-C a USB-C o USB-C a Lightning). Podrás cargar móviles, auriculares y otros gadgets, sean o no de Apple.
¿Cómo se accede a los archivos de un pendrive USB-C en iPad?
Simplemente conecta el pendrive al puerto USB-C. El sistema reconocerá la memoria y podrás gestionar tus archivos desde la app Archivos, copiando y moviendo documentos con facilidad.
Este puerto se ha convertido en un estándar que ofrece muchas más posibilidades que la simple carga de batería. Facilita la transferencia de archivos, permite ampliar el ecosistema de accesorios y convierte la tablet en una herramienta polivalente tanto para el día a día como para usos profesionales.
